A pesar de que hemos logrado grandes progresos en el acceso al tratamiento del VIH, con casi 22 millones personas que viven con el VIH, el acceso a las pruebas rutinarias de carga viral sigue rezagándose. La prueba de carga viral rutinaria (RVLT), que permite a las personas ver si su tratamiento contra el VIH está funcionando, es una parte esencial del tratamiento eficaz contra el VIH. Aunque muchos gobiernos se han comprometido a proporcionar la RVLT, en algunos países no está disponible con frecuencia, es inasequible o no se ofrece rutinariamente a las personas que viven con el VIH. En respuesta a esto, se han puesto en marcha campañas para exigir que se disponga de pruebas rutinarias de carga viral, incluyendo ITPC y Médicins Sans Frontières. En octubre de 2015, el ITPC lanzó la campaña Be Healthy-Conozca su carga viral, en asociación con el SIDA y la Alianza de derechos para el sur de África (ARASA). La campaña en curso tiene como objetivo informar a las personas que viven con el VIH sobre el valor de las pruebas de carga viral para movilizar a las personas a exigir pruebas rutinarias de carga viral e instar a los gobiernos a asegurarse de que las pruebas están disponibles rutinariamente, accesibles y asequibles.
